INFIERNO INTERIOR

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INFIERNO INTERIOR
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En ocasiones me tildo frente al espejo y fijo la vista en algún punto de mi rostro. Me miro sin mirarme e imagino esa microscópica guerra interior que se libra entre mis defensas y el virus, o los virus, que ya hicieron cuartel en mi sangre. Mi mirada se pierde y mi mente se dispara. Pienso en soldados perfectamente diferenciados, CD4 por acá, CD8 por allá, pero trabajando en conjunto contra un especie de hidra que al perder una cabe

za hace nacer tres en su lugar. Imagino a mis soldados cayendo de a montones, y los que quedan, pidiendo a gritos refuerzos, armaduras nuevas y más blindadas, porque las que tienen ya no sirven para ese enemigo que cada vez es más fuerte y se las ingenia para subsistir. Entonces recuerdo que son las 11 am y corro a mi armería con forma de pastillero y les enviar un nuevo suministro de escudos y cascos más fuertes para seguir resistiendo. Para seguir resistiendo...

YO SABIA

YO SABIA que algún día dejaría de pelear contigo,
SABIA que abarcarías mi vida hasta el punto de vivirla por mi,
SABIA que al verme en el espejos te vería en mis ojeras, mis cicatrices, mis canas, mis arrugas,
SABIA que al estar pisándome siempre los talones no demorarías en agotarme el espíritu,
SABIA que harías mi vida más mecánica; despertador, desayuno, pastilla, trabajo, almuerzo, ducha, pastilla, cena, cama y 7 horas después nuevamente despertador (agregaría gimnasio quizás, visita al doctor y reunión con amigos, pero las pastillas estarían siempre ahí, a la misma hora por el mismo canal...),
SABIA que cambiarías mi vida, y dejaría de ser lo que era, me sacarías algunos sueños y me darías pesadillas,
SABIA que el caudaloso río de lagrimas que me quito el buen dormir en los primeros tiempos, se convertiría en gestos y miradas amargas, resentidas, resignadas... y que con ello me convertirías en "el chico de mirada triste".

LO QUE NO SABIA era que me harías un superviviente,
NO SABIA que me harías más desenvuelto y me darías una gran cuota de autosuficiencia,
NO SABIA que me traerías amigos verdaderos y un amor incondicional,
NO SABIA que me enseñarías el concepto de AMOR PROPIO, al entender que no tengo porque conformarme ni creerme menos por tenerte en la sangre,
NO SABIA que entre RENDIRME y ACEPTARTE terminaría eligiendo lo segundo (porque ni creas que te sobreviví una década para dejar que te lleves mi vida, mi salud, mis afectos...),
NO SABIA, NI MUCHO MENOS ME LO HUBIERA IMAGINADO, que terminaría agradeciéndote por venir a sacudir mi vida, ponerla patas arriba, partirme el corazón un sin fin de oportunidades y dejarme más de una vez tirado al borde de la nada.

Gracias por haber sido tan hijo de tu madre y con ello haberme hecho más fuerte.

Desdoblamiento

Suelo despertar a las 3am para ir al baño cuando la vejiga no aguanta más, y en eso me quedo un par de largos minutos mirándome en el espejo. Me veo y no me reconozco, o mejor dicho, me miro y no me gusta lo que veo, porque suele ser una imagen demacrada, como si mi piel estuviera estirada, mis ojeras hondamente pronunciadas, mis ojos cubiertos de vasos dilatados, los pómulos exageradamente punteagudos... Una sensación horrible, como si la enfermedad me hubiera subcionado la vitalidad. Entonces ocurre por unos minutos un desdoblaje de mi persona que no me gusta. Es como si por unos minutos pudiera verle el rostro al virus diciéndome jocosamente "no te olvides que estoy acá", pero que por suerte desaparece con la mañana cuando todo en mi cara vuelve a su lugar...

Nunca más.

Me hicieron creer que mi cuerpo era un bomba, que era tóxico, que no me merecía la oportunidad de amar, que era un discapacitado, un sexópata, un pervertido, un pecador, que había perdido mi derecho a exigir... Pero hoy les digo "BASTA!". Nadie más que yo paga mi comida, mi ropa, mi techo, mi auto y todo lo que tengo. Soy dueño de mi vida y nunca más voy a esconderme, nunca más voy a conformarme, nunca más voy callarme, y sobre todo nunca más dejaré que usen mi enfermedad para sacarme la sonrisa y hacerme creer que soy menos que este, ese o aquel. Nunca más... 
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Buenas noches.

Reciclando minas desactivadas

Empece juntándolos porque al principio no quería tirarlos a la basura y que algún vecino fisgón pudiera saber que tengo VIH, pero luego con la revolución de visibilidad que viví en los últimos meses (el canal de youtube incluido como el salto a la piscina sin saber si había agua) ya no necesité esconderlos. El tema es que ahora me cuesta tirarlos, los siento como pedacitos de mi historia, cada uno de ellos estuvo un mes en mi vida, son como cartuchos vacíos de balas que se dispararon en algún momento y que ahora guardo como souvenirs, porque en algún momento me ha ayudado a aferrarme a la vida, a ganarle... A GANARLE!... 
Así como hice un ciervo de cartón viejo, podría hacer algo con estos frascos vacíos ¿pero que? y mientras pienso, se siguen acumulando...

EL MUNDO ME ALEGRA, ME DECEPCIONA Y ME MATA DE ODIO

¿Saben que es lo que me anima a seguir adelante y al mismo tiempo me quiebra el corazón hasta el punto de quitarme el sueño y además me llena de odio?

ME ANIMA ver que cuando nací, los planetas se alinearon de tal manera que pude hacerlo en un país donde tener VIH es justamente una enfermedad crónica de tratamiento asegurado por el Estado, y que la sociedad tiene una cabeza medianamente abierta como para no demorar en entender que VIH no es lo mismo que SIDA y mucho menos igual a la peste bubónica.

ME QUIEBRA el corazón saber que muchos otros no han tenido ni tendrán la misma suerte de nacer en un país que vele por su salud. Me quiebra el alma saber que algunos nacerán en Somalía o Haití, donde con tener derecho a que el agua este limpia ya es lujo de ricos; me quiebra el alma saber que otros nacerán en Pakistán, Donde el gasto militar es SIETE VECES superior a lo que se invierte en educación básica, BÁSICA!!! (la secundaria no existe); se me suspende la respiración pensar que muchos niños y niñas ni siquiera saben que es "ser niño" porque la prostitución, la trata y el trabajo forzado es la realidad que les toca vivir, la realidad que de una patada los hizo y los hace hombres y mujeres que se saltearon toda una franja etaria...

Y ME LLENA DE ODIO que muchas veces no nos detenemos un momento para preguntarnos ¿estamos haciendo un buen uso de nuestro derecho a la salud? o más bien hacemos uso de esa mecánica ya incorporada de pedir y pedir y pedir, y cuando lo tenemos no lo usamos, porque me hace ver más flaco, porque me quita el sueño, porque me llena la cara de granitos, o simplemente porque caemos en esa corriente de enceguecidos que dicen "El SIDA no existe, es un fraude de la industria farmacéutica", olvidándonos que en otro punto del planeta hay niños y adolescentes que nunca podrán mostrar al mundo el brillo de sus mentes, porque lamentablemente estas nunca brillaran, porque nunca accederán a una escuela donde un maestro le dirá "tenes derechos, usalos"... y así cada minuto que pasa el mundo pierde en manos del SIDA a un gran médico que no llegó a ser, un brillante científico que no llegó a ser, un talentoso músico que no llegó a ser, un genio premio nobel que no llegó a ser, un hombre común y corriente que conoce los beneficios de sus derechos y los usa pero... tampoco llegó a ser...

11 AÑOS

Acá estoy actualizando mi blog después de muchos años desde de mi ultima publicación. Usare esta entrada para contarles que hace unos días cumplí 11 años del día que me diagnosticaron VIH+ y desde entonces hasta ahora, mi vida a cambiado de tantas formas que si el YO de hace 10 años viera al YO del presente, lo desconocería completamente.
Para hacerlo un poco mas simple, les contare que ya termine mis estudios, que ya no vivo en el lugar que vivía hace cinco años atrás, me asumí abiertamente como homosexual con VIH y vivo con mi pareja en una relación serodiscordante hace casi 3 años.
No soy activista, no soy orador motivacional, no doy entrevistas, no suelo estar al frente de una marcha, ni hago nada que merezca que otros me tomen como modelo, héroe u ejemplo. Soy una persona común que hace lo que hace todo el mundo, pues como los demás, me despierto de lunes a viernes a las 7am para ir a mi trabajo, el cual consiste en dar clases de literatura en escuelas secundarias.
No fue fácil aceptar que pase a engrosar las estadísticas de VIH en el mundo, tuve toooooodos los miedos, planteamientos, dudas, enojos y lagrimas que tiene aquel a quien el ELISA le dice "si", pero continué y acá me ven, sigo, mas viejo, mas sabio, mas vivo...

La pluma del Quetzal

06:19, 14/01/2016